Hay que desayunar bien y lo hago en Els Poblets en el Strudel Cafe.
Me pido algo sencillo como un par de croissants y un caffè macchiato algo
trucado.
Lo de trucado es por el sobre de leche condensada que le da un toque más dulzón.
Subo a Vall de Laguart y me siento en un banco a observar el paisaje.
Ahora observo mi máquina.
Un lugar muy tranquilo.
Me meto por caminos que no salen en los mapas.
Hay que aprovechar bien los últimos días de otoño.
Paso por el bar Toni de Alcalalí a saludar a Joselito.
Aquí en Senija hay un buen grafiti y hay que cogerle bien el ángulo.
Este es el bueno.
Puro arte con trampantojo.
3 FOTOS DE ARCHIVO
En uno de mis múltiples viajes pude ver algo parecido.
Está en Pobladura de las Regueras en la provincia de León.
Verdadero arte.
Aquí estoy en Jávea delante de la catedral de las pastelerías de mi zona.
Lo acabo de medir y hay 11,8 km en línea recta hasta mi casa. En caso apurado si se rompiesen todas la motos y el coche tardo 3 horas a pie.
Estos sitios me hacen feliz, muy feliz.
Pido el de mango para empezar.
Luego me pediré el de selva negra que me ha hecho gracia el nombre.
Yo también estaba, je, je.
Para los cincuentones nostálgicos va dedicada esta foto.
Aquí venía muchos sábados del 84 y 85. Guardo buenos recuerdos de esta discoteca.
Ya estoy en Dénia en la zona del puerto.
Otro trampantojo.
Casualmente ahora sale el barco hacia Ibiza.
Desde mi casa lo veo todos los días, pero desde el otro lado, hoy toca estribor.
Ahora es cuando pega el acelerón y sale una nube negra de sus escapes, o debo decir chimeneas, no sé.
Llego a casa y como yo ya he comido les doy un poco a los michis de la urbanización para que disfruten.
Lo han devorado tan rápido que les tendré que poner otra vez.
Miauuuuuuu.
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