Dejamos la moto en la sombra.
Estamos preparados.
Saludo a un viejo amigo.
Extrañas formaciones rocosas.
Al fondo de ve el cabo de San Antonio.
Ahora mejor.
Sacamos la chicha, para mí lasaña.
Un buen sitio para echarse una siesta.
Hey, fotooooo.
Estaba disfrutando de los precipicios como cualquier felino.
Pequeños islotes.
Los pinos crecen tanto que no dejan ver todo el paisaje, hay que estirar
el cuello.
Ese es el mirador número 9, llamado Falzia.
Hace poco estuvimos ahí y puse una crónica.
Tengo varias crónicas de los miradores, aquí pongo una:
Lo que comentaba antes de los pinos...
Nos damos un pequeño paseo para quemar alguna caloría solitaria.
Vamos a zampar algo dulce, tenemos que recuperar las calorías quemadas
con el paseo.
Difícil elección.
Pues me pones un trozo de cada tarta, cada uno se gasta el dinero como
quiere, son 20 euros, algunos se compran 4 paquetes de tabaco que valen lo
mismo.
Yo también estaba, je, je.
Esperando que me traigan la bandeja.
Ahora pasamos por el bar de mi amigo José y nos zampamos un heladito,
concretamente el Cornetto Esagerato XXL de Frigo, una delicia tanto el de
chocolate como el de nata.
Zona de la ruta.
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